Descenderemos por el GR 11 hasta alcanzar la Pleta d’el Tormo (1.730 m), donde hay un puente, junto a la cabaña del Tormo. No cruzar el río. Abandonando el GR, se asciende en dirección E, hasta las ruinas del viejo cuartel militar de Estós. Desde el cuartel, continuar unos 200 m al SE hasta llegar a un desvío. Coger este desvío en dirección NO para remontar la margen derecha del barranco Perdiguero. Este tramo transcurre hasta la Pleta de Perdigueret (2.140 m), una vaguada donde el arroyo forma meandros y se encharca. Continuar entonces en dirección NE, hacia las paredes oeste del Perdigueret. Tras superar un umbral rocoso y dejar abajo el Ibonet de Perdiguero, se alcanza la Collada l’Ubago (2.712 m).
Una vez allí se emprende el tramo final de la ascensión, remontando al Norte hasta encontrar, sobre la cota 2.880 m, la ruta que asciende desde el ibón Blanco de Literola. Después, por la arista SE del Perdiguero, que lleva primero al mojón de piedras de la Fita de Perdiguero (3.171 m), llegaremos poco después a la cima del Perdiguero (3.219 m).
La vuelta será por el mismo itinerario de subida.
Itinerario de alta montaña que discurre en parte por terrenos rocosos y sin traza evidente, siguiendo hitos de piedra. Es posible encontrar nieve al inicio del verano. La arista final es una amplia loma de bloques graníticos, fácil pero larga.
Atención al desnivel a superar (1.630 m.) y al largo recorrido (17,6 km). Se recomienda vigilar los horarios y no dudar en volver si las fuerzas y la meteo no acompañan. Prever alimento y bebida suficiente, así como ropa de abrigo y lluvia. Planifica la actividad, equipa tu mochila y actúa con prudencia.