SAN MARTÍN DE LA VIRGEN DEL MONCAYO. RUTA DE LA DEHESA

San Martín de la Virgen de Moncayo - Mirador de la Cruz - Balsa del Espinillo - San Martín de la Virgen de Moncayo

  • Circular
  • 1
  • 2
  • 2
  • 2
  • 1h 40'
  • 5,4 Km
  • 150 m
  • 150 m
  • Tipo de recorrido
    1. El medio no está exento de riesgos
    2. Hay más de un factor de riesgo
    3. Hay varios factores de riesgo
    4. Hay bastantes factores de riesgo
    5. Hay muchos factores de riesgo
    1. Caminos y cruces bien definidos
    2. Sendas o señalización que indica la continuidad
    3. Exige la identificación precisa de accidentes geográficos y de puntos cardinales
    4. Exige técnicas de orientación y navegación fuera de traza
    5. La navegación es interrumpida por obstáculos que hay que bordear
    1. Marcha por superficie lisa
    2. Marcha por caminos de herradura
    3. Marcha por sendas escalonadas o terrenos irregulares
    4. Es preciso el uso de las manos para mantener el equilibrio
    5. Requiere pasos de escalada para la progresión
    1. Hasta 1 h de marcha efectiva
    2. Más de 1 h y hasta 3 h de marcha efectiva
    3. Más de 3 h y hasta 6 h de marcha efectiva
    4. Más de 6 h y hasta 10 h de marcha efectiva
    5. Más de 10 h de marcha efectiva
    * Calculado según criterios MIDE para un excursionista medio poco cargado
  • Horario completo de la excursión
  • Distancia horizontal recorrida
  • Desnivel de subida acumulado
  • Desnivel de bajada acumulado

Descripción

La ruta empieza en San Martín de la Virgen de Moncayo, junto al Ayuntamiento. Comenzar cruzando el río Huecha, y continuar subiendo por el camino que conduce al Mirador de la Cruz, desde donde podemos disfrutar de unas magníficas vistas tanto del Moncayo como de la localidad de San Martín.

Dejar el camino para tomar una senda que discurre atravesando el barranco de la Dehesa de Valdegarcía, desembocando nuevamente en un camino que seguimos hasta un cruce, donde debemos coger el de la derecha. Podemos disfrutar también de un bonito mosaico que componen carrascas y robles, hasta llegar a la zona de descanso: La balsa del Espinillo, lugar perfecto para hacer un alto en el camino y retomar fuerzas.

Bordear la balsa para retornar a San Martín, dejando ya el Moncayo a nuestras espaldas. Para recorrer el último tramo, debemos abandonar el camino por la izquierda para tomar una senda que nos adentra en un pinar para desembocar de nuevo en el camino que conduce al mirador de la Cruz, por el cual retornamos a nuestro punto de partida.

Seguridad

Ruta ideal para recorrer en familia o como complemento a otras excursiones o visitas de la zona. Atención a los cruces de camino.

Planifica la actividad, equipa tu mochila y actúa con prudencia.

Mapa interactivo